He intentado durante meses vivir sin él. Besar otras manos, recuperar la risa de una tarde entre cervezas y encontrar aficiones en realidad absurdas pero que servían para "matar" mi tiempo. He luchado contra mis sentimientos y he dado golpes a este corazón maldito que se niega a seguir a la cordura. Di un portazo a los recuerdos y adorné mi sitio de nuevos colores. Pero él sigue siendo y estando en mi cabeza (sin remedio). Él sigue susurrando te quieros e inventando futuros. Y de nuevo me quedo a medias... porque vuelvo a engancharme y vuelvo a caer, y esta ha sido la más fuerte; quizás por real, por irremediable, por caprichosa...
Y seguimos..., aunque no tengo ni idea de donde
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5 comentarios:
Como un barquito en el ancho mar, sin vela, ni remos, ni dirección q tomar...
Un besote, cielo.
Date tiempo... no se puede olvidar de un día para otro lo que nos ha llenado el corazón.
Ten paciencia contigo...
Leí tu blog (o medio) casi de un tirón, no entiendo... si te entiendo a ti, pero no el porqué de este "seguimos" que no solo sigues tu aunque duela más que reconforte. Al mañana voveré, mañana... tiempo... más tiempo porque ahora no puedo... no sé hacerte feliz... pero seguimos, no te vayas, te mantengo, cuando caigas te recogeré con dos palabras y me iré de nuevo hasta que parezca que te pierdo y volveré y te diré... y seguimos...
Ánimos,
Ampa
El mundo está lleno de tíos y tías. No vale la pena pararse por nadie porque nadie se para por ti.
Todo es demasiado falso
Hablas como si hubieras nacido para amarle siempre, sin remedio. Y yo sigo pensando que ninguna herida dura siempre a no ser que no dejes que cicatrice. Y menos si sólo sigue en tu mente y no en tu realidad diaria.
Venga, si quieres salir, saldrás. Sólo sigue buscando el camino.
Un beso
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