viernes, abril 29, 2005

Hundida... esa es la palabra....

Hundida porque ayer me dijo que yo debería tener otra actitud, que la tristeza que reflejaban mis ojos sólo empeoraba las cosas, que ahora mi “papel” consistía en seducirle... Me miré entonces las manos y observé como caían las lágrimas. Rebotaban contra mí, como si fueran piedras. Ya no sabía ni sé que debo hacer. Creo que para él la palabra amor no significa lo mismo que para el resto de mundo.
Y yo soy una imbécil por permitir.... todo esto

jueves, abril 28, 2005

...

A veces sientes que las palabras se agotan.... que desearías escupir de alguna manera todo lo que llevas dentro... Contarle y contarte a ti misma cómo, porqué y cuándo. Pero siempre gana la partida el silencio porque las palabras ya no valen ni pueden expresar este dolor. Me gustaría cogerle del brazo y suplicarle... suplicarle hasta quedar rendida que no se marche, que no se aleje del “nosotros”, y que vuelva a hacerme esa promesa.
¿Veis? Sus palabras siempre terminan “afectándome”.

Odio todo esto.... Vuelvo a sentirme perdida... completamente perdida...

Cobarde

Tenía el corazón encogido.... mientras me aseguraba que aún no había entendido la razón de este distanciamiento. Estoy seguro de lo que siento; yo no podría vivir sin ti. Sólo necesito un tiempo para “matar” esta angustia, nada más.
Y yo le miraba, callada, porque en el fondo quería gritarle que era y es un COBARDE.

miércoles, abril 27, 2005

...

Sin futuro..., sin fuerzas..., sin ganas..., sin esperanza..., sin NADA

... pero yo sé que saldré, que encontraré un hueco por el que escaparme y seguir peleando.
Y a todos los que estáis conmigo, GRACIAS... porque sois mi mejor compañía y el lugar al que siempre podré volver para resguardarme. No sabéis aún lo bien que me sientan vuestras palabras...

Caminando...

martes, abril 26, 2005

...

El “trancazo” que tengo me está ayudando a disimular las lágrimas. Pero sí, en realidad, son lágrimas

"..."

Ahora ya ni siquiera me “gusta” escuchar sus historias de madrugada. Me “aburre” su forma de ver las cosas, y ese egocentrismo que rodea cada una de sus palabras. La humildad no es una de sus virtudes, aunque él no haga otra cosa que proclamarla. ¡Mierda!, pienso, no es tan perfecto...”ni tan especial”...
Ayer le dije que ya había dejado de ser justo; este estar sin estar, este querer hoy para rechazarme mañana. No ves que estoy dormido. Esa fue su maldita respuesta. Pero en realidad la maldita soy yo por dejarle entrar en mi casa.

PD: Las comillas forman parte de la terapia

...

Después de una largo fin de semana, alejada de A., creí que estaría preparada para volver al campo de batalla. Esta vez pretendía colarme en primera línea, avanzar, ganar... y olvidar que existió un nosotros. Pero volví a escuchar te quieros, y volví a pensar que de nuevo era posible. Qué estúpida fui....
Y hoy es como si tuviera que ponerme en pie, por quinta vez, y arrancarme las entrañas, y apartar el corazón y jugar a que puedo y quiero ser una (en el fondo no es cierto).

Odio que haga esto... porque él es consciente de que me está “matando”...
Me he prometido a mí misma que no volveré a escucharle...

jueves, abril 21, 2005

palabras

Le escuché mientras me decía que no tenía que preocuparme, que él me quiere, que soy la única persona a la que ha sido capaz de echar de menos. No verme, no estar, no contarme... y el dolor. Dijo que no podría estar lejos de mí porque sería como morir en vida. “Me pegaría un tiro” sentenció porque ya estaría muerto...
Siguen siendo sólo palabras...
Le amo... sí, y ayer le escuché con el corazón en un puño, y la garganta partida en dos, pero él tiene que cerrar un capítulo de su vida para seguir en la mía...
Duele, y mucho, pero seguimos caminando...

miércoles, abril 20, 2005

Lo más difícil (II Parte)

Escuchar su voz al otro lado del teléfono y un te echo de menos y un podemos vernos y un “no tengo nada que pensar” porque sabes que está a punto de empezar a girar la misma puta noria de siempre. Y esta vez no puedo permitírmelo...

martes, abril 19, 2005

Lo más difícil...

No escuchar ruidos detrás de la puerta ni el sonido de las llaves al entrar. Preparar la cena para dos y olvidar que sobra un plato. No reconocerte en el espejo porque siempre te miraste con sus ojos. Dejar de sentir el olor de la pintura al contacto con el agua y el roce de una caricia. Mantenerse en pie aun sabiendo que lo que realmente deseas es quedarte en el suelo y esperar a que alguien te recoja. Darte la vuelta en la cama para abrazar un cuerpo que ya sólo sigue vivo en tus sueños. Y recorrer la almohada con tus dedos para intentar recuperar el calor que antes había entre las sábanas. Y dejar de escuchar el sonido de los pájaros porque ahora los pájaros ya no cantan; sólo escupen y hablan de rencor. Intentar dormir sin cerrar los ojos. Y ducharte a solas, sin que nadie aparezca tras las cortinas para robarte un beso. Y escucharte llorar en la penumbra y no saber qué hacer para pararlo. Encender la televisión y ver la película que siempre le gustó y aquel anuncio que le daba tanta grima. Y sentir que sobra sofá, y cama, y casa...; ahora todo es demasiado grande para alguien tan menudo. Y piensas en tu otra vida, y en ti y en la manera de continuar. Te inventas aficiones porque aquí lo importante, te dices a ti misma, es no pensar. Pero piensas y te miras el maldito corazón y ves sus pedazos. Y entonces te agarras la mano como si tú fueras tu mejor amiga, y te acaricias el pelo... para que regrese la calma. Pero la calma no llega y vuelve a aparecer el miedo, y el dolor, y tiemblas, y gritas, y te retuerces... Los pájaros ya no "hablan"..., y tú tampoco.

lunes, abril 18, 2005

Alejamientos

Nos hemos tomado un tiempo. Él se ha tomado un tiempo..., aunque en parte yo le haya obligado a hacerlo. Por primera vez mi corazón ha dejado paso a mi cabeza y he podido pensar... y ver... y valorar. Lo vi claro cuando le pregunté que quería hacer y sólo supo contestar un no sé, vacío, que se me clavó en el costado. Ha llegado el momento de demostrar, de apostar y de implicarse. No es justo que sea sólo yo la que entregue sin condiciones porque en este “barco” deben remar dos. Y ya no valen los “te quieros”, ni los “mi vida”, ni los abrazos...
No sé cuanto tiempo va a durar esto, este alejamiento forzado y forzoso (también necesario). Es probable que le pierda por el camino..., pero entonces sólo descubriré que nada habrá merecido la pena: ni él, ni mi amor, ni mi lucha, ni mis lágrimas...

Estoy mucho más serena de lo que esperaba. Quizás ya he llorado demasiado en las otras partidas y ahora, por fin, estoy preparada para empezar a luchar por mí. También sé que puedo caerme en cualquier momento, desfallecer en medio de la soledad y del recuerdo... pero hoy, aunque esté débil, aunque sufra, quiero intentar sobrevivir...
Él dice que tiene miedo...
Yo estoy literalmente “cagada”.

miércoles, abril 13, 2005

.....

Regresa la calma, y los te quieros y los abrazos dados con las entrañas. Un no podría separarme de ti en la vida ha conseguido “curar” el dolor y el llanto. Quizás sólo sea una ilusión, pero yo... no sé hacer otra cosa que devolver el abrazo.

Sí, una vez más...

martes, abril 12, 2005

...

El dolor es insoportable...
... hasta quemar por dentro.
Siento un bombeo lento..., una punzada mortal, silencio, pánico...Y MIERDA, ¿sabéis qué?, NO ES JUSTO...

Desde el Infierno

Su cara se transformó en dolor, y su dolor en recuerdos, y sus recuerdos en dudas, y sus dudas en Ella, y Ella en la peor de mis pesadillas. Y me pidió respeto, comprensión, amor incondicional... Habló de ingratitud (mi ingratitud) hacia él y hacia ella. Y yo, en medio del desastre, con el corazón despedazado, volví a caerme. Y sigo ahí abajo, sin poder levantarme ni una sola milésima del suelo. Me exige fortaleza, lucha, entrega, sin saber...y te quieros y nuevas promesas... Pretende que yo me mantenga erguida con un fantasma sobre mis hombros, que sea capaz de pelear hasta el final, aunque le pierda...
Y se niega a entender mi llanto porque son los demás los que sufren...
Y me muero de miedo, y me agarro a esto que es mío, y que nunca será de ella...
Hemos pasado más veces por esto. “Podemos superarlo” sentenció él, y se tumbó en el sofá para hablarme del futuro, del bebé, de la casa... Y yo, aún no sé, como no le mandé a la mierda...

Los próximos capítulos...,
desde el infierno

lunes, abril 11, 2005

Condenada

Aún no he conseguido cruzar ni una palabra conmigo misma. Cada vez que lo intento mi corazón se retuerce, como si él supiera antes que yo que “esto” va a doler...
Me preguntaba ayer hasta donde llegan los límites, cuánto más seré capaz de ceder y de sacrificar por mantenerme a su lado. Él no lo sabe, pero yo me siento en un puto combate de boxeo continúo. Sin tregua. Sin fin. Y sin victoria.
Sólo me siento fuerte cuando él está a mi lado. Entonces, me miro al espejo y pienso que ha dejado de compensar pero al día siguiente, cuando me levanto y cruzo esta ciudad para llegar a mi oficina, vuelvo a sentir el fuego, la garra, y el dolor de la distancia. No puedo renunciar...

viernes, abril 08, 2005

Necesitaba un tiempo...


Dejar de escribir sobre A. y encontrar mi propio espacio. Alejarme de las sensaciones que me produce hablar de él y recuperarme... Ser más fuerte, más valiente, más honesta conmigo misma (también con los demás). Y aún necesitaré un tiempo... Le amo, sí, pero por encima de demasiadas cosas, y eso, tiene que cambiar. Él tiene que empezar a demostrar.. . y yo tengo que encontrar el camino para entenderle. Deshacerme de lo que me hace daño, de sus palabras, de ese tono maldito, de los fantasmas, de su pasado, de ellas... . Entablar una conversación conmigo misma, esa que nunca he tenido, y decidir si puedo, quiero y estoy dispuesta a continuar. Y no, no es nada fácil.